Facebook se prepara con políticas que forman parte de una estrategia para limitar el caos y salvaguardar la democracia en las elecciones del 3 de noviembre.
Los planes de contingencia para
manejar los comicios incluyen: bloquear los anuncios políticos desde la semana
previa, limitar el reenvío de mensajes en su servicio de Messenger, implementar un “Centro de Información” para los
votantes y añadir una etiqueta informativa a cualquier contenido que busque
deslegitimar los resultados o afirmar que los métodos de votación conducen a fraude.
Además, con la colaboración de Reuters y el Grupo Nacional de Elecciones,
se añadirá un enlace en el que los usuarios podrán verificar el recuento final
de votos, en
caso de anuncios prematuros de victoria
Una investigación piloto de Facebook pagará hasta US$120 a usuarios por desactivar sus cuentas, con el objetivo de estudiar los efectos de esta plataforma. Se prevé la participación de 200.000 a 400.000 perfiles que reflejen la diversidad del país.
Mal precedente
Las elecciones de 2016 dejaron una sombra negra sobre la
compañía. El escándalo que involucra a la firma británica Cambridge Analytica y los
datos de 87 millones de usuarios fue un duro golpe a su reputación; en tan solo
un día el valor de Facebook cayó US$37.000 millones. Después de
múltiples investigaciones, La Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos
interpuso una sanción de US$5.000 millones;
cifra que se convirtió en una multa récord por violar la privacidad de los
consumidores, indica la BBC.
La plataforma Netflix lanzó el
documental “Nada es privado” en julio del año pasado, en el que se retrata las malas prácticas en el manejo de la seguridad de los datos.
Ana Claudia Carnero García, alumna de mercados de la
Comunicación
No hay comentarios.:
Publicar un comentario